Todo el mundo tiene un sueño, o al menos debería. Está bien para ponerte una meta en la vida, para que cuando llegues digas: "lo conseguí". La última vez que tuve una conversación de los sueños de la gente alguien dijo. "pues eso de tener un sueño está muy bien, así sabes hacia dónde encaminarte en la vida". Pero conseguir cumplir tu sueño cuesta mucho o poco. Para algunos uno de sus sueños es aprender perfectamente un idioma, hacer puenting, visitar su ciudad favorita, ser arquitecto...
Lo triste de los sueños es que por mucho que digan que se hacen realidad, es que a más de uno no se le han cumplido. Sueños rotos, en el cajón de los recuerdos, para contarles a la gente pues yo tenía este sueño y que te pregunten que si lo has cumplido y digas que no.
Todos dicen: lucha por tus sueños y se harán realidad, pero no saben lo que cuesta de verdad, aunque también es verdad que a algunos les cuesta más que otros.
El título es sueños rotos porque yo una vez tuve un sueño. Ahora se ha roto.
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